Trata a las otras personas como si fueras tú misma. Tolera las diferencias y acepta las opiniones de los otros, aunque no coincidan con las tuyas.
Me cuido a mí misma. Conozco las reglas y las acepto, conozco mis puntos fuertes y los potencio, descubro los puntos de mejora y los mejoro. Mantengo unos hábitos de vida saludables de acuerdo con la práctica del deporte.
Sé que siempre puedo mejorar si tengo la voluntad para hacerlo. Doy el máximo de mí misma en cada entrenamiento y partido, porque esto beneficia al crecimiento del equipo.
Soy consciente que el beneficio del grupo va por delante del beneficio propio. Ayudo a las compañeras siempre que lo necesitan.
Desde el momento en que entro a formar parte del equipo, tomo la obligación de asistir a todas sus actividades para que el grupo pueda funcionar correctamente.
Comparo mi rendimiento con el que tuve ayer y no con el de las otras. Soy el ejemplo de lo que pido al resto y acepto los comentarios de entrenadores y compañeras.